Ser
críticos e incluyentes, lo que necesita el periodismo sobre conflicto armado
Por
Luisa Fernanda Jaramillo García
Muchos medios de
comunicación que informan sobre el conflicto armado en Colombia presentan
carencias a la hora de informar. Para especialistas y personas víctimas esto se
debe a la poca escucha a los afectados, a la revictimización que generan en
ocasiones y a los fines políticos y económicos que persiguen la mayoría de las
veces.
Expertos
como Luis Gonzalo Medina Pérez y Carlos Mario Correa Soto, profesores de
comunicación y periodismo de la Universidad de Antioquia y Eafit,
respectivamente, coinciden en que los medios de comunicación apenas están
intentando asumir su responsabilidad con el tratamiento informativo sobre el
conflicto armado, a raíz de la conciencia y compromiso que ha despertado el
tener que informar sobre el proceso de paz que se adelanta en La Habana, Cuba.
Para
Gonzalo Medina Pérez, la responsabilidad está presente, pero “se puede ser
irresponsable por acción, al informar de manera ilimitada; o por omisión, cuando
se informa de una manera precaria, que no orienta, que no ilustra y que por lo
tanto hace que un esfuerzo de hallar la paz se vaya malogrando a través de un
trabajo que va agotando y quitando fuerza a ese proceso”.
Darío
Sierra Aguilar, víctima del conflicto armado, comenta que los medios actúan
responsablemente cuando informan de una manera “libre y autónoma”, pero no lo
son cuando informan de una manera “sesgada y politiquera”.
Por
su parte, Teresita Gaviria, una de las representantes de víctimas escogidas para
ir a La Habana, y líder de la asociación Madres de la Candelaria, expresa que
los medios informativos no son responsables: “Les ha faltado estar de cara con
las víctimas y las dejan como en un rezago por allá abandonadas”.
Informan pero no
escuchan
Teresita
recuerda momentos en los que ha sido difícil lograr atención de los medios: “No
les importaban mucho las víctimas, había que llamarlos: mire yo soy víctima,
ustedes también deben de cubrir lo que hacemos”. Así mismo, recapitula cuando
celebraron los diez años de la asociación y los invitaron al evento y no fueron
porque tenían otro con el Alcalde de Medellín; luego, a los ocho días, la
buscaron y ella les respondió: “¿Recuerdan que hace ocho días los invitamos al
evento de la asociación y otras víctimas que vinieron de Urabá? Entonces quédense
con el alcalde”.
Es
un reclamo generalizado que los medios informen también sobre otros temas que
hagan visibles a las víctimas y que no solo sean los hechos que victimizan; que
den a conocer, por ejemplo, programas como Mientras Volvemos a Casa, que articula
el deporte, la recreación y la cultura, “pero infortunadamente los medios no van
más allá de mostrar el hecho conflictivo; también deben informar sobre posibles
soluciones y programas de resocialización y apoyo para estas personas”,
enfatiza Iván Darío Campo Sánchez, quien trabaja en la Corporación Vive con
población víctima del desplazamiento forzado.
Para
Carlos Mario Correa Soto, docente de periodismo de Eafit, esta situación se
debe, en parte, a que los medios informativos quieren contar la historia de un
país en el menor tiempo posible: “Como ocurre en RCN y Caracol, que en una hora
nos muestran lo que está pasando aceleradamente”, exigiendo a los periodistas
que hagan su labor más rápido para que “quepa más información”. Además, explica
que se está logrando una incomprensión por parte de los ciudadanos, porque
ofrecen muchas versiones, pero pocas historias. De esta manera, muchas veces
las voces de las víctimas se limitan al
mero registro de una declaración.
En
el mismo sentido, Óscar Alberto Morales Orozco, periodista del Noticiero Despierta
Antioquia y el periódico Inforiente, considera que los medios de comunicación
deben ser incluyentes con las víctimas: “Toda vez que en reiteradas
oportunidades le han dado más relevancia al victimario y han desconocido la
importancia de los procesos de organización, reconstrucción de tejido social y
elaboración del duelo que adelantan las víctimas del conflicto armado”.
En ocasiones, se
revictimiza
La
revictimización es más conocida en Psicología como victimización secundaria. “Este
término fue acuñado por Khüne para referirse a todas las agresiones psíquicas
(no deliberadas pero efectivas) que la víctima recibe en relación con los
profesionales de los servicios sanitarios, policiales, o de la judicatura (…), así
como a los efectos del tratamiento informativo por parte de los medios de
comunicación”, explica Antonio Ceverino Domínguez, psiquiatra del Instituto de
Victimología, en su artículo Conceptos
fundamentales de victimología.
Luz
Ángela Salazar, psicóloga y profesional social del Museo Casa de la Memoria,
explica que “los medios tienen una gran responsabilidad, no solo referida al
hecho de informar lo sucedido, sino también de denunciar y generar la reflexión
sobre los acontecimientos del conflicto”; también manifiesta que en ocasiones
se limitan a promover la “desinformación” y vinculan su posición, haciendo
señalamientos y permitiendo que se repita la vulneración.
Por
otra parte, Javier Monsalve, víctima del desplazamiento, albergado en la Corporación
Vive y líder social, sostiene que él y otras personas víctimas se sienten
revictimizados por muchas agendas informativas de los medios: “Siempre están
tapando tantas cosas del Gobierno”; igualmente, Darío Sierra Aguilar, miembro
de Las Madres de la Candelaria, siente que cuando los medios comunican con
carácter “sesgado y politiquero” se siente ofendido y con ganas de “compartir
el dolor con la asociación”.
Manejos políticos y
económicos
Muchas
veces los medios de comunicación persiguen intereses económicos y políticos que
pueden afectar el tratamiento de sus contenidos informativos. En relación con
lo anterior, Correa Soto, quien además de docente ha sido periodista, afirma
que los medios son una mescolanza de intereses que afectan la información; así
mismo, que “todos los medios colombianos son dependientes; por lo menos, los
masivos, son dependientes de la pauta publicitaria, de los compromisos
adquiridos con los gobiernos de turno, del poder económico y empresarial”.
Añade que hay medios que están luchando por ser independientes como La Silla
Vacía; sin embargo, “también depende de la pauta publicitaria y esto afecta
indudablemente”.
En
el panel sobre el papel de los medios de comunicación en la última campaña
electoral a la Presidencia, desarrollado en el programa de opinión Dos puntos de RCN Televisión, los
panelistas hicieron evidente el manejo político y económico de la información
por parte de los medios, en el contexto de una campaña que giró alrededor de
los diálogos de paz.
El
periodista Juan Gossaín, afirmó que nunca había visto una “más penosa
manipulación de la prensa (…) Manipulación consentida no es manipulación, es
complicidad”. También se preguntó por el papel de la prensa: “El problema es
que los medios solo muestran lo que les conviene y un periodista no es el que
hace depender su información de los intereses de los candidatos y del perjuicio
que pueda hacerle al adversario; el periodismo a lo único que debe obedecer es
a los principios éticos del oficio”.
Ante
este panorama, el profesor Medina Pérez concluye que la mejor manera de que los
medios de comunicación sean responsables a la hora de informar sobre el
conflicto, es de una manera crítica, mostrando las distintas posiciones,
avances y dificultades, y también los programas de resocialización y apoyo a
las víctimas, entre otros temas.